Baleares |

Líder mundial en español

Martes 11/05/2010. Actualizado 11:08h.

anapixel

SUCESOS | En Palma

Intenta matar a la novia de su marido a golpes de rodillo

  • La agresora puso un GPS en el coche de su marido para localizar a la amante

Carmen, de 38 años, no pudo soportar que su marido tuviera una aventura con una mujer de 27. Tras localizar el domicilio de su oponente vía GPS (se lo había colocado en el coche a su esposo infiel) se puso un chándal negro y una media por la cabeza, cogió un rodillo de amasar, una jeringuilla rellena de un líquido amarillo (que la Policía aún analiza) y se fue a casa de la otra, presuntamente, con las peores intenciones.

Era el viernes pasado, sobre las 11 de la noche. La vecina de un piso de la calle Manacor acababa de llegar de unas horas de ocio en la calle, dejando a sus hijos al cuidado de una canguro. A esa hora la inquilina —de 27 años, amante del marido de la presunta agresora— oyó que llamaban a la puerta. Abrió, confiada, creyendo que era la canguro que se había olvidado algo. Pero no. Lo que vio al abrir fue una mujer histérica y encapuchada que se abalanzaba sobre ella con un rodillo de amasar.

La mujer de 27 años sufrió golpes con el rodillo por la cabeza y otras partes de su cuerpo. La agresora, aún con la media por la cabeza, la arrastró por la casa, por los pelos, y siguió con la paliza, llegando a golpearla además con la cabeza contra el suelo y puede ser que contra el canto de un mueble.

En un momento dado sacó una jeringuilla de una bandolera que llevaba a la cintura e intentó inyectarle algo. La agredida aprovechó ese momento para defenderse, le arrebató la jeringuilla y la media y reconoció a la casi ex de su actual pareja. La agredida echó a correr por las escaleras y llamó a la Policía.

La jeringuilla iba llena de un líquido amarillo que se encuentra en estos momentos en los laboratorios del Grupo de Policía Científica de la Jefatura Superior de Policía Nacional de Palma. De su composición puede depender la acusación final contra la presunta agresora, dado que si fuera un veneno o líquido corrosivo podría desprenderse una intención de matar.

Tuviera o no intención de matar, de lo que sí tenía intención —presuntamente— la agresora era de hacer daños —por la paliza— y de asustar, ya que le dijo a su víctima que llevaba una pistola en la bandolera y que la mataría. El arma en cuestión no ha sido hallada por el momento por la Policía en el registro que se hizo luego del domicilio de la sospechosa.

Cuando los agentes policiales de una dotación Z llegaron al lugar de los hechos se encontraron a la agredida, en la calle, sangrando y muy asustada, temiendo por su vida y por la de sus dos hijas —dos niñas de 5 y 7 años, de una relación anterior a la que mantenía con el marido de la presunta agresora—, que había dejado en la casa, en su huida.

Los agentes policiales comprobaron que en la casa no había nadie más que las dos niñas durmiendo, que afortunadamente no se habían enterado de nada. Con la descripción de la agresora —la agredida la conocía como la ex de su actual pareja— pudieron detener a Carmen ya de regreso en su casa de las afueras de Palma, cerca de la barriada de Son Rullán. Parece que aún llevaba el chándal.

Carmen estaba en trámites de separación de su marido, con el que tiene un hijo. En los últimos tiempos lo había denunciado por malos tratos. Las tensiones nacían, sin duda, de los devaneos amorosos de su casi ex. Al parecer Carmen le había colocado un GPS en el coche, sospechando que se la estaba pegando con otra. De ese modo supo dónde vivía la novia de su esposo. De hecho, parece que también la conocía de vista, que la había seguido mientras vigilaba a la pareja. La Policía que puso a la mujer a disposición judicial ayer por la tarde, la acusa de presuntas amenazas, lesiones y allanamiento.

Publicidad

cuenta NÓMINA de ING DIRECT‚ sin letra pequeña

anapixel
PaginasAmarillas.es
anapixel
Publicidad
Publicidad
Haz Click
© 2010 Unidad Editorial Internet, S.L.